El infierno de las drogas quedo en el pasado

Cuando probé la marihuana a los 17 años no pude dejar de fumarla todos los días, yo pensaba que no me iba a pasar nada, siempre fui deportista, buen hijo, hermano y amigo. Pero con el paso de los años me fui dando cuenta de que había caído en una emboscada.

Cada vez me empecé a aislar mas y mas, tenia delirios de persecución, socializar me causaba pánico solo quería encerrarme a fumar, ver la tv y jugar video juegos. Muchos amigos se alejaron de mi y solo me juntaba con los que consumían y aunque eran mis amigos de toda la vida llego un momento en el que ya no podía hablar ni siquiera con ellos.

Cuando cumplí 25 años decidí que era hora de dejar la mota pero al intentarlo me empezaban a dar ataques fuertes de pánico y ansiedad, por eso siempre recaía había caído en una emboscada, sino fumaba me sentía mal y si fumaba a los 20 minutos volvía a experimentar apatía por la vida y un cansancio crónico como si tuviera 80 años de edad, siempre tomaba siestas pero me levantaba cansado. Me di cuenta de que yo no podía dejarlo y empecé a experimentar ataques de ira por la culpa de pensar que todo mi potencial lo había tirado a la basura por la droga.

Mis antiguas amistades estaban saliendo adelante, ya viven solos, graduados y la mayoría con esposas y yo estaba en el hoyo. Todo me causaba estrés, incluso socializar con mi familia. No podía enfrentarme a la vida como una persona normal porque todo me irritaba y sentía que la gente estaba en mi contra.

El 8 de junio del 2019 a mis 27 años ingrese a Narconon, había escuchado muchas historias de éxito, había estado en grupos de AA pero siempre recaía y también había tenido terapias con psiquiatras pero nada. Cuando ingrese aquí empecé a sentir lo que era enfrentarme a la vida. Tuve momentos drásticos de impaciencia y ansiedad. Pero como pasaron esos días de ansiedad me pude sentir muy bien física y mentalmente, me sentía con mucha energía y vitalidad, tenia que pasar por eso para poder salir adelante.

“Quiero ser un ejemplo para mis seres queridos cuando vuelva y empezar de cero.”

Hoy estoy mejor que nunca, la paranoia se ha ido, me despierto descansado y con energía y en general estoy feliz. Quiero ser un ejemplo para mis seres queridos cuando vuelva y empezar de cero. El infierno de las drogas quedo en el pasado, soy un hombre nuevo gracias a Narconon.

S.A.—estudiante del programa Narconon Latinoamerica.