Opiaceos: una droga letal
Origen
El Opio es conocido desde la más remota antigüedad. Encontramos referencias de sus efectos en la Odisea de Homero. Los efectos psicotrópicos, adicción y dependencia que producen el opio y sus derivados están bien documentados desde entonces. Es una droga analgésica narcótica que se extrae de las cabezas verdes de la adormidera, “Papaver somniferum”, es una planta que recibe el nombre de amapola, llega a crecer metro y medio y presenta flores blancas, violetas o fucsia.
No todos los opiáceos son de origen natural. Muchos de ellos son productos químicos sintéticos (Metadona, Buprenorfina, Fentanilo, Codeína y otros) que se utilizan en la medicina. Los principales derivados de los opiáceos son la morfina y heroína.
Morfina
La morfina es un alcaloide del opio. Es una sustancia controlada utilizada en premedicación, anestesia, analgesia y tratamiento del dolor. Es un polvo blanco, cristalino, soluble en agua y inodoro.
Efectos secundarios de la morfina
La morfina tiene efectos colaterales importantes como:
- Náuseas y/o vómitos.
- Euforia.
- Sudoración.
- Boca seca.
- Alteración en los resultados de análisis de sangre.
- Puede agravar el estado del paciente cuando este padece enfermedades como: pancreatitis, asma, EPOC, alcoholismo, hipotensión, estreñimiento crónico, hipotiroidismo, trastornos graves del hígado o del riñón, entre otras.
- Somnolencia, desorientación, mareos, inestabilidad.
- Visión borrosa.
- Estreñimiento.
- Astenia.
- Prurito.
- Alteraciones respiratorias y/o variaciones en la presión arterial.
- Dependencia (puede ocurrir si su uso es prolongado).
- Dependencia física en el feto y síndrome de abstinencia en el bebé si se administra a una mujer embarazada. Además, pasa a la leche materna, por lo que no debe emplearse durante la lactancia.
Heroína
La heroína es producida a partir de un extracto de la bellota de la amapola. Se presenta en forma de polvo blanco o marrón, o como una sustancia negra y pegajosa conocida como “alquitrán negro”
¿Cómo se consume la heroína?
La heroína se puede inyectar, inhalar o fumar. Las tres vías de administración hacen que la droga llegue rápidamente al cerebro, lo que contribuye a sus riesgos para la salud y al alto riesgo de adicción, una enfermedad crónica y recurrente causada por cambios en el cerebro que se caracteriza por la búsqueda compulsiva de la droga sin importar las consecuencias.
¿Cómo afecta la heroína al cerebro?
Al entrar al cerebro, la heroína se convierte de nuevo en morfina y se adhiere a moléculas en las células conocidas como receptores de opioides. Estos receptores se encuentran localizados en muchas áreas del cerebro (y del resto del cuerpo), especialmente en aquellas áreas que participan en la percepción del dolor y en la gratificación. Los receptores de opioides también están localizados en el tallo cerebral, que controla procesos automáticos esenciales para la vida como la presión arterial, la excitación y la respiración. Con frecuencia, la sobredosis de heroína implica la represión de la respiración, lo que puede resultar en la muerte.
REFERENCIAS:
https://prezi.com/qvg02avt83bv/la-morfina-es-un-alcaloide-fenantreno-del-opio-siendo-prepar/
http://www.webconsultas.com/curiosidades/origen-de-la-morfina-130